

Creada por el referente de la "Perfumería Furiosa" Germaine Cellier, la composición de Fracas es floral, dominada por ricos tubérculos oleosos.
En ella se siente una fina aura cremosa y floral gracias a la alta concentración de la Tuberosa Absoluta originaria de las regiones exóticas de la India.
La Tuberosa es directa. O le atraerá y le absorberá en sus blancas, carnosas y embriagadoras hojas o le desanimará sin piedad.
Se apoya en sus "hermanas malvadas" sin las cuales no va a ninguna parte: el Jazmín francés y el Azahar tunecino. Este fabuloso trío le hará darse cuenta de que tiene que ser la mejor versión de sí misma para poder vestirla.
Es la Emperatriz de todos los aromas blancos.
¡Nadie sin personalidad podría llevar Fracas!
HIPNÓTICA y GLORIOSA
HAY PERFUMES DE LEYENDA, PERFUMISTAS LEGENDARIOS Y PERFUMES QUE SE CONVIERTEN EN OBSESIÓN.
¡FRACAS ENCARNA LAS TRES VIRTUDES!
AÑO: 1948
NARIZ: Germaine Cellier
La Tuberosa es una nota de perfume sensual, que recuerda al atardecer y a una piel cálida. Su extrema y a menudo chocante sensualidad puede provocar respuestas diametralmente opuestas en las personas. Mientras algunos retroceden horrorizados ante la idea de ser asfixiados en su embriagador abrazo, otros se pierden en sus capas sensuales.
La fragancia es enteramente dominada por una tuberosa adictiva y sorprendentemente siniestra.
Después de la apertura inicial de los cítricos y el acorde floral verde, una calma olfativa antes de la tormenta; la oscuridad comienza a reunir fuerzas.
El nardo ondula lenta y sensualmente, emergiendo bajo el velo de dulces notas delicadas. Oscurece el resplandor del azahar que, sin embargo, permanece en el fondo, brillando como luces en un viaje pantanoso. La dulce y cremosa nota del nardo está bellamente adornada por el jazmín y la violeta que dan una sombría calidad introspectiva a la composición. El coriandro es un sorprendente toque de frescura primaveral, burlón y evanescente como si fuera llevado por el viento: el momento es distinto, el siguiente se ha desvanecido. La composición está ornamentada con maderas y robles, que proporcionan un oscuro contrapunto a la exuberante orquestación floral.
Y sin embargo, la franqueza de Fracas no se detiene aquí...
Ninguno de los perfumes de tuberosa posteriores a Fracas hubieran existido sin esta obra maestra.
Algo en él puede llegar a asustar pues golpea todos los sentidos.
Fracas huele a seducción, un tipo de seducción peligrosa. Una seducción que puede "llevarle a la muerte". Una seducción oscura hecha de flores; de unas flores que necesitarían de luz para vivir y, sin embargo, la forma en que está orquestada le succiona a uno llevándole hacia un agujero negro del que no se puede salir. Llegando a los límites de la frontera olfativa no le permitirá respirar y es que cuándo uno prueba Fracas ya es tarde para volver pues uno puede llegar a sentir el placer de perder el aliento; el placer de la renuncia, el placer de perderse en él.
¡Fracas es una pócima sin duda peligrosa!
Germaine Cellier crearía dos perfumes para Robert Piguet - Fracas y Bandit. A través de la fragancia, pretendía mostrar dos modos de comportamiento y carácter femenino: Una mujer femenina se presentaba con Fracas, una narcótica y seductora tuberosa, mientras que las mujeres masculinas se personificaban en el perfume Bandit.
Desde que apareció en el mercado, Fracas se ha convertido en el favorito de muchas damas conocidas, desde el Viejo Hollywood hasta las divas del pop contemporáneo: Marlene Dietrich, Madonna, Linda Evangelista, Marilyn Monroe, Rita Hayworth, Kim Basinger, Brigitte Bardot, Carolina Herrera, Iman, Ivana Trump y la Princesa Carolina de Mónaco - todas ella se rindieron y sintieron fascinación y devoción por esta obra maestra del perfume.
Fracas se ha descrito como "puro veneno" y a "fruta prohibida". Es un aroma que puede dejar sin sentido. Es un olor que, según dicen algunos, no ha de usarse nunca en una cena porque el resto de comensales puede sentirse demasiado abrumados. Es un olor en el que dos pulverizaciones son suficientes. Es un aroma que puede hacer que algunos rueguen por no dejarse embriagar. Incluso uno de sus adorables admiradores masculinos lo describe como "el perfume de la viuda negra: te atrae y luego te mata con un beso..."